MI ADOLESCENCIA EN POESÍA
Cuando tenía 15 años, el pensado "amor de mi vida" era un chico que miraba todas las noches en el mismo boliche. Él no me registraba, yo no sabía su nombre; pero mi fantasía era tan grande que era el dueño de toda mi inspiración.
En cada clase aburrida, surgían mis poemas en el medios de los apuntes del secundario; venían hacia mí las palabras más novelescas y no podía parar de escribir acerca de ese adolescente desconocido.
BUSCÁNDOTE INTENSAMENTE
Hace mucho tiempo que no te veo
y mi cabeza vive pensando en vos;
por eso voy a ir a ese lugar conocido
en el cual comencé a morir de amor.
Ansiosa, te busco desesperadamente
por cada rincón de ese esperado lugar;
aunque empiezo a rendirme agotada
cuando veo que no te puedo encontrar.
Me traslado hacia el espacio de origen
en el que siempre permaneces para bailar,
observo esas caritas más que familiares,
pero, como viene sucediendo, no estás.
Vuelvo a mi anterior sitio, deshecha,
imaginando una nueva noche sin tí.
Sin embargo, decido probar otra vez
en otro sitio en el que te veo sonreír.
Esa noche gris se iluminó de repente,
junto con mi corazón alborotado
que no paró de latir constantemente
cuando vio que te había encontrado.
Por fin unos minutos sin tu presencia,
ya que hacía varios días que no te veía
y cada una de esas eternas madrugadas
mi débil y flechado corazón desaparecía.
Mariflú Martínez
Comentarios
Publicar un comentario